miércoles, 2 de noviembre de 2016

LA PUERTA QUE NOS SEPARA




Buenas noches, Capitán, un día como hoy no podíamos olvidarnos de ti y precisamente este escrito que me envío nuestro amigo Miguel Iborra, ha sido el causante de que vuelva a escribirte.
 Me ha gustado mucho llamar puerta a la muerte y saber que  tras ella todo dolor se termina,y que El nos aguarda tras esa puerta es lo que disipa todo temor.

Jesús tiene la llave, seguro que se la pidió a Pedro para ser él quien te abriera, había llegado la hora de que tu sufrimiento terminara y llegases a su lado. Puede que fuera María, Mami como te gustaba llamarla en los últimos tiempos, quien le susurrara que  ya era el momento, que ya estaba bien. de padecer.

Y de la noche a la mañana nos quedamos sin ti, pero mira hoy día  de los Santos difuntos, no lloro porque sé que estás ahí tras esa puerta que nos separa y que tú no puedes abrir, pero sí me gustaría que estuvieras cerca de ella el día que me toque atravesarla, que insinuases a Nuestra Madre, cuando llegue  mi hora,  que consiga de su Hijo amantísimo un acelerón para ese último tramo que me separa de su Reino y de ti.
 
 ¿Cómo habrás pasado este día? rodeado de los Fieles Difuntos, de tus padres y aquellos que quisiste en la tierra y sobre todo, saboreando, contemplando  la sonrisa amada  de María, nuestra Madre.
Me hago miles de preguntas que no tienen respuesta, mira que ya han fallecido muchas personas cercanas a mi,  que ya mis  hermanos y yo estamos en las primeras trincheras junto a esa Puerta y sin embargo, no  me mueven tanto a seguir preguntando...,Dios sabrá por qué. 
 
 Ya estoy hablando a lo loco, como siempre, pero tú me  entiendes ¿Verdad?
 
 
La imagen puede contener: velas


Una de tus músicas

1 comentario:

Rosa dijo...

También te entiendo y ¡cómo!
Es precioso.

Besiños del alma.