martes, 28 de diciembre de 2010
viernes, 24 de diciembre de 2010
AQUELLAS NAVIDADES
Y yo estaba recien casada |
Pero sigo añorando las montañas de tarjetas que se recibían y escribían |
Y todos se iban tan felices con unas perrillas de propina |
Guardias de la porra los llamábamos |
Nuestros regalos siempre iban al guardia del cruce de Goya con Alcalá |
En mi familia nunca ha tocado la lotería
También entonces se hacían compras |
Los Reyes me trajeron la Gisela, más barata que la Mariquita Pérez. Hace cinco años, mis hijas me dieron la sorpresa, en Reyes, con un Mariquita
PERO SIEMPRE, SIEMPRE,
SED FELICES EN NAVIDAD
¡¡¡ FELICIDADES !!!
domingo, 19 de diciembre de 2010
ÁMAME
Por el amor humano llegamos al AMOR divino. Si lo que yo te amo no te lleva a Dios, ese amor se consume entre tú y yo, no transciende, no tiene visos de eternidad, cuando yo me muera termina nuestro amor, tal vez se acabe antes, tal vez te canses de mi, tal vez me cambies, me cambies por otro amor.
El amor verdadero, hecho de alma y cuerpo, va y viene de Dios, de Dios hecho hombre, con corazón de hombre, con carne de hombre que sufre, por ti y por mi, los latigazos del desamor.
A ti lo digo, a ti que vives a mi lado, a ti que me lees y a ti que vagas por el mundo sin conocerme:
Ámame mucho y llega por ese amor a Dios
sábado, 11 de diciembre de 2010
miércoles, 8 de diciembre de 2010
FELICIDADES
UNA BONITA CANCIÓN PARA FELICITAR A NUESTRA MADRE INMACULADA
FELICIDADES TAMBIÉN A TODAS LAS INMACULADAS Y CONCHAS,
ESPECIALMENTE A MI AMIGA CONCHA ZARAGOZA Y, COMO NO, A NUESTRA QUERIDA BLUMUN
domingo, 5 de diciembre de 2010
EN EL MISMO HUECO
Bienvenido, amor, en esta noche larga, en esta hora de lágrimas. No quiero que te rias de mi pena, tampoco que llores con mi llanto, sólo que tu mano se entrecruce con la mía para caminar hacia la vida que desconocemos, la vida que tememos, la que nos ha de encontrar irresistiblemente juntos, por encima del mal, por encima del bien, por encima de lo que tú quieres y yo deseo. Ha de encontrarnos de sal y de mareas, diluidos en las aguas de un futuro incierto, de un futuro tuyo y mío donde no haya dolor ni llanto capaz de separanos, donde la risa se funda con las lágrimas, donde los dos entremos en el mismo hueco.
Bienvenido, amor, para beber este sabor amargo y dulce del invierno.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)