miércoles, 27 de febrero de 2013

VIVIR EN EL SIGLO XXI

 
 
 
Vivir en el siglo XXI no es cualquier cosa, lleva aparejado una serie de condicionamientos buenos, malos y regulares, pero que no queda otro remedio que asimilar e intentar sacar partido de ellos, aceptando lo que conviene para el desarrollo integral de la persona o deshechando todo aquello que vaya en detrimento de la misma.
 
Aquí os dejo, en clave de humor, una pequeña lista  de ciertas actitudes que vienen a ser costumbre en la mayoría de las personas. Juzgar vosotros mismo si son de verdadero progreso y provecho para el crecimiento personal del ser humano:
 
_Intentas entrar con tu password hasta en el microondas.
 
_No has jugado al Solitario con cartas reales desde hace años.
 
_Tienes una lista de quince números de teléfono para tu familia de tres miembros.
 
_Envías un e-mail a tus compañeros de la mesa de enfrente para preguntarles: "¿Te apetece bajar al bar? Y ellos te contstan: "Vale, dame cinco minutos".
 
_Chateas varias veces al día con un desconocido del otro extremo del mundo, pero aún no has hablado con el vecino de la puerta de al lado en lo que va de año.
 
_Te compras un ordenador y a la semana ya está anticuado.
 
_La razón por la que no estás en contacto con algunos de tus amigos es que no tienen dirección de e-mail.
 
_Tu idea de organización se basa en el post-it de colores.
 
_La mayoría de los chistes que te cuentan te llegan por e.mail y no de en persona.
 
_Cuando llegas a casa, después de un largo día de trabajo contestas al teléfono  de manera comercial: "Hola, buenos días, dígameeeee...".
 
Puede que esté equivocada, pero creo que vamos en camino de convertirnos en autómatas.
 



La lista está tomada del calendario, taco, del Mensajero del Corazón de Jesús

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo malo de la red es qe también es una gran fuente de engaños que llega a destrozar parejas.

Santos Plagio dijo...

Preciosa canción, más me caben dudas al respecto del exito de dichas relaciones sobre todo cuando falla la sinceridad y quedas oculto en falsa identidad. Nada prometo para a nadie engañar, nada pido para a nadie deber, solo doy palabras de la red, del alma, de mi ser , de mi no ser, para que cada cual las interprete y aproveche o malgaste pero sin nada que temer o con mucho para ayudar.