Muy bueno! Mira: los que dicen eso es que no saben lo que se pierden, están realmente desorientados en su vida. Ahora estoy leyendo un librito de José A. Pagola: Creer ¿para qué?. Conversaciones con alejados, que me está dando una luz y una dimensión muy clara del tema. Creo que los que no encuentran nada en la Iglesia y en la misa es porque aún no tienen claro que Dios mismo está allí, esperándole, tranquilo y sin bullas, y eso es lo que el hombre moderno no entiende hoy, que hay algo tan hermoso como la fe que no necesita fanfarrias ni aspavientos, sólo el silencio para escuchar a Dios con el corazón. Un besote muy grande para ti y para el familión.
Qué razonamiento más aplastante. Yo, además, voy por puro egoísmo, ¿Donde se encuentra paz mayor que frente a un altar? Un beso, Militos. (Esperando al Lunes para desvelar misterios blogueros)
Es verdad, yo a veces he pensado que no me sirve de nada ir a Misa los domingos, porque no es que no recuerde el sermón, es que ni lo escucho, me suelo distraer. Pero para mí, dejar de ir a Misa, es alejarme totalmente de Dios, porque los quehaceres diarios te hacen fácil olvidarlo. Así, cuando has tenido una semana en que ni te has acordado de rezar, luego llegas a Misa, ves al Señor y te arrepientes y te enmiendas para la siguiente. Y así una tras otra. Y no te digo ya para quien vaya a Misa a diario.
Tendré en cuenta este tema para escribir un post en mi blog cuando tenga tiempo, y lo enlazaré al tuyo.
Divino Corazón de Jesús: Ante la vista de tantos males como presenciamos en nuestra Patria, cómo merecido castigo de nuestros públicos pecados, recurrimos a Vos suplicando vuestra misericordia a favor de este pueblo de vuestra predilección. Acordaos de vuestra promesa de reinar en España y con más veneración que en otras partes. Que vuestro reinado de amor se establezca ya en nuestra querida España. Que prenda aquí con más fuerza ese reinado divino y de aquí se comunique por todo el mundo. Sea vuestro Divino Corazón la victoriosa bandera que presida nuestras justas ansias de restauración tradicional misionera y nos dé la victoria contra todos los enemigos de Dios y de la Patria. ¡Virgen del Pilar, Inmaculada Reina de España, acelerad el reinado del Corazón de vuestro Hijo! AMÉN P. jOSE MARÍA ALBA CERECEDA S.j.
4 comentarios:
Muy bueno! Mira: los que dicen eso es que no saben lo que se pierden, están realmente desorientados en su vida. Ahora estoy leyendo un librito de José A. Pagola: Creer ¿para qué?. Conversaciones con alejados, que me está dando una luz y una dimensión muy clara del tema. Creo que los que no encuentran nada en la Iglesia y en la misa es porque aún no tienen claro que Dios mismo está allí, esperándole, tranquilo y sin bullas, y eso es lo que el hombre moderno no entiende hoy, que hay algo tan hermoso como la fe que no necesita fanfarrias ni aspavientos, sólo el silencio para escuchar a Dios con el corazón.
Un besote muy grande para ti y para el familión.
Excelente presentación...Saludos!
Qué razonamiento más aplastante.
Yo, además, voy por puro egoísmo,
¿Donde se encuentra paz mayor que frente a un altar?
Un beso, Militos. (Esperando al Lunes para desvelar misterios blogueros)
Es verdad, yo a veces he pensado que no me sirve de nada ir a Misa los domingos, porque no es que no recuerde el sermón, es que ni lo escucho, me suelo distraer. Pero para mí, dejar de ir a Misa, es alejarme totalmente de Dios, porque los quehaceres diarios te hacen fácil olvidarlo. Así, cuando has tenido una semana en que ni te has acordado de rezar, luego llegas a Misa, ves al Señor y te arrepientes y te enmiendas para la siguiente. Y así una tras otra. Y no te digo ya para quien vaya a Misa a diario.
Tendré en cuenta este tema para escribir un post en mi blog cuando tenga tiempo, y lo enlazaré al tuyo.
Besos
Publicar un comentario